lunes, 29 de octubre de 2007
De atrás para adelante y de adelante hacia atrás
miércoles, 10 de octubre de 2007
¡Porque éste sí tiene tamaños!
Genio y figura… a la basura…
Este país sí que luce alrededor del mundo. En días anteriores hemos escuchado, leído o visto una serie de noticias acerca de nuestro humildísimo ex-candidato presidencial Roberto Madrazo, del infinitamente maravilloso Partido Revolucionario Institucional.
No faltará quien diga que es una simple campaña de desprestigio en contra de nuestra afamada figura política, o quien afirme que después del escándalo de Fox se necesitaba un pobre chivo expiatorio que viniera a quitar el nombre de Chente y de Martita de los tabloides más críticos de nuestra nación.
Lo cierto es que prácticamente todo lo que se ha dicho de la trampa de Madrazo en el maratón de Berlín, celebrado el 30 de septiembre de este año, ha sido prácticamente cierto. Shame on you little Mexicans! Era lo que casi gritaba el Washington Post que se dedicó a hacer una crónica del desliz de nuestro Rober precioso.
Y no sólo en los diarios del gabacho hablaban de las proezas atléticas (totalmente ilusorias) de nuestro ex presidenciable, lo hacían muchos otros medios informativos. Esto, para muchos mexicanos se ha traducido en dos palabras que aquí cito:
“¡Qué vergüenza!”
Fue lo primero que también su servidor pensó, pero tras unos minutos de silenciosa meditación surgió un leve recuerdo… Aquel inicio de primer año de primaria en que a Omar Flores, en su primer examen del curso, se le preguntaban los nombres de los dedos de la mano. ¡Pero oh sorpresa, se le olvidaba uno! Así que sin pensarlo sacó sigilosamente su libreta y buscó la respuesta. Fue en ese momento cuando uno de los compañeros gritó: ¡Miss. Omar está viendo las respuestas!
Es lógico pensar que desde aquel trauma infantil, este seguro servidor se ha abstenido casi por completo de hacer trampa en su vida. Peeeeero esto no sucede con el mundo mexicano real. No señores. Madrazo lo ha puesto al descubierto frente al mundo, todos hablan de él, pero lo que no notamos es que este país está cimentado en las trampas y en la violación de las reglas. Así que aquí hago un MUY ligero recuento de algunas de las trampas y violaciones más celebres de los mexicanos:
--Cuando hay una fila para (inserte aquí el evento, expendio de tortillas o para recibir algo gratis) nunca falta el listo que le guarda el lugar a la comadre, a los sobrinos de la comadre, al primo que viene con la novia, al amigo del primo que llegó de improviso y hasta a los canarios de la abuela.
--Bajo la misma situación de “fila”, peor aún, el que sin conocer a nadie, en el momento que ve que la fila avanza… pues se hace el occiso y así como que no queriendo y sordeándose de cualquier ataque, entra a la fila sin haber esperado.
--El “sólo la puntita”.
--Aplicar el famoso “San Lunes” amado por los agradecidísimos albañiles, y en algunos casos también venerado por los estudiantes universitarios.
--Estacionarse en un lugar en donde hay un “monito con una ruedita” dibujados (aka discapacitados), porque ¿para qué van a querer coche los discapacitados si ya andan en silla de ruedas, no?
--Saltarse los semáforos cuando ostentan la luz roja, “Le digo, oficial, que yo chequé y no venía nadie cruzando, por eso me pasé.”
--Los famosos justificantes piratas (también apodados –falsificantes-), que justifican milagrosamente los días de a)cruda, b)hueva o c)simple y sencilla pinta.
--El reconocido Acordeón que viene en una de sus muchas modalidades como lo pueden ser, la pierna rayada, la muñeca rayada, la palma de la mano rayada, el rollito de papel en la pluma Bic, las respuestas en el Kleenex, el papelito hecho bolas, el apunte en el estuche o calculadora científica, la impresión en acetato, o la última moda: los mensajitos o notitas en el celular.
--La mordida al poli, o cualquier figura burocrática.
--Firmar o “checar” en el trabajo para luego salirse y, claro, volver al final de la jornada para firmar de salida.
Y muchas otras más que son difíciles de enumerar, tales como copiarle la tarea al compañero, hacerle la tarea a los hijos, los partidos de fútbol de primera división arreglados, vender kilos de 950 gramos, etc, etc.
Es así como concluyo con una cita que mencionaba al principio, la frase dicha por casi todos nosotros hacia el infinitamente cuestionable Roberto Madrazo: “¡Qué vergüenza!” Pero tal vez, amigos, no hay que irnos hasta Berlín para ver las trampas o lo que nos enorgullecemos llamando “el ingenio mexicano”.
Eso, todo eso está entre muchos de nosotros. Así que ojalá que la próxima vez que estén a punto de brincarse un simple tecnicismo, o hacer una “trampita” piensen en una sola cosa, una:
“¡Qué vergüenza!”
viernes, 5 de octubre de 2007
P R Ó X I M A M E N T E
Ya les diré por qué.
Regresa pronto.
miércoles, 3 de octubre de 2007
Grace Kelly...
" I could be brownI could be blue
I could be violet sky
I could be hurtful
I could be purple
I could be anything you like
Gotta be green
Gotta be mean
Gotta be everything more
Why dont you like me?
Why dont you like me?
Why dont you walk out the door! "
Mika, canción: Grace Kelly